El Momento Cero de la Verdad es cuando los consumidores se centran en buscar información respecto a un producto sin ninguna inclinación a una marca en específico, simplemente buscan información de forma general, información que les sea de provecho y puedan incentivar su compra. Es donde el cliente no se concentra tanto en comprar, más bien en conseguir información importante que puede estimular su deseo, y es donde el vendedor tampoco se concentra en vender, sino que se en proveer información importante en redes sociales y poder dejar una buena impresión para que ese tipo de clientes, cuando se encuentren en el Momento Cero de la Verdad, puedan optar por consumir sus productos.
Por ejemplo, cuando una persona quiere comprar ropa de bebé, en el Momento Cero de la Verdad, esa persona no dice: “voy a comprar de tal marca”, ejemplo: “voy a comprar en Gerber ”, “voy a comprar en Carters”. Es cuando la persona simplemente se relaciona con el producto en sí, no con la marca; es cuando entiende que tiene una necesidad que debe ser satisfecha.
Por ejemplo, una madre busca ropa elegante para un cumpleaños. La madre no se está dirigiendo exactamente a una marca en particular, pero sí se encuentra con la necesidad de encontrar ropa elegante para su bebé que cumple años. Entonces, es cuando emprende la búsqueda y el buscador le arroja muchísima información. Ella comienza a comparar, a evaluar lo que tiene a la mano con lo que necesita y a investigar en redes sociales acerca de marcas que llamaron su atención mediante la búsqueda. Comienza a buscar opiniones, reseñas, todo lo que pueda fomentar y fortalecer la impresión que tuvo en primer lugar hacia el producto en sí que necesita, y después hacia la marca.